Caserío de piedra de casi 200 años de antigüedad, con categoría de 3 estrellas, aislado en plena naturaleza, entre frondosos bosques y paisajes idílicos.
El exterior de la casa está cubierto por una preciosa enredadera de primavera a otoño, cuyos colores varían según la época del año.
La casa está rodeada de árboles, especialmente robles y castaños, y de grandes macizos de hortensias, flor muy típica del Norte.
Disfruta de todo esto desde el porche descubierto, con cómodas hamacas y mesitas bajas, será inolvidable.

El interior de la casa se distribuye en 3 plantas unidas mediante una escalera:
En la planta baja, antigua cuadra, se encuentra una sala de estar diáfana muy amplia y fresca, con un antiguo billar que puede cubrirse para convertirse en mesa de ping pong. Dispone de dos mesas, sillas y un gran banco antiguo, como todo el resto del mobiliario, además de una leñera.

En la planta principal se encuentra la cocina, con estructura antigua pero totalmente equipada y dotada del máximo confort. Dispone de frigorífico, lavaplatos, vitrocerámica, horno, microondas, y otros pequeños electrodomésticos como cafetera, tostadora, hervidor…etc. También hay una mesa redonda con sillas y una alacena.
Justo al lado se encuentra una salita de estar con un tresillo, dos sillas y dos aparadores donde se encuentra la televisión, la ventana da sobre el jardín.
En esta planta también se encuentran dos dormitorios, uno de ellos cerrado por ser el que utiliza la propietaria cuando la casa esta libre, y un baño con dos apartados cerrados, uno destinado a la lavadora y el termo, y otro a la ducha.

En la última planta de la vivienda, antiguo pajar, se encuentran los otros dormitorios, ambos con dos camas, mesillas de noche con lámparas, cómoda y armario. Todas las habitaciones tienen radiador eléctrico instalado y cuentan con ventana, contraventana y tragaluz.
Aquí también hay un baño completo en el que la bañera imita a las antiguas, con patas, pero es totalmente moderna y funcional, llevando además una ducha de mano incorporada.
El resto de la planta se corresponde con una gran estancia con dos ambientes, cada uno con dos tresillos y mesa central. En el centro de la estancia se encuentra la chimenea de piedra y cerrada de cristal, que proporciona un calor muy agradable a toda la planta.